El Sodalicio de Vida Cristiana ha sido disuelto por el Vaticano, pero aún no se sabe en manos de quién o quiénes quedará el millonario patrimonio de esta organización que en medio siglo de vida hizo negocios de los que poco se ha conocido, pero del que varios integrantes se habrían beneficiado.
En la última edición del semanario Hildebrandt en sus Trece, se narra algunos de los negocios del Sodalicio en Lima y algunas regiones y que sumarían más de 800 millones de dólares. Hasta ahora el papa Francisco y el Vaticano no han mencionado ninguna disposición sobre los bienes generados por esa organización disuelta tras los escándalos de abusos sexuales y otras violencias.
Lo que revela el semanario es que los negocios del Sodalicio van desde colegios, universidades, cementerios, concesiones mineras hasta empresas offshore. Esta organización fundada por Luis Figari, acusado de abusos físicos, psicológicos y sexuales por exmiembros de la organización y en diversas investigaciones periodísticas y fiscales, está siendo investigada por la fiscalía de lavado de activos a cargo de Manuela Villar.
El Sodalicio es administrado sobre todo por el sacerdote Luis Baertl Jourde, Juan Len Álvarez y Carlos Neueschwander Sahuire.
¿De dónde provienen los bienes del Sodalicio? Se cuentan de dos formas: donaciones de feligreses y rentabilidad de las empresas.
Parte del patrimonio se acumuló en dinero y propiedades a través de la Asociación Civil San Juan Bautista que es dueña de los camposantos «Parque del Recuerdo» que funcionan en Lima (Callao, Ancón, Puente Piedra, Lurín y Carabayllo). Recordemos que en anteriores investigaciones periodísticas se supo que esta asociación fue fundada por el obispo de Piura y Tumbes José Antonio Eguren, recientemente expulsado también del Sodalicio.
En Arequipa, San Juan Bautista tiene cuatro propiedades y en Piura tiene más de 50 inmuebles inscritos. Esta asociación se vio involucrada en el escándalo de presunto tráfico de tierras denunciado por comuneros de Piura que incluso llegaron hasta el papa Francisco.
Marcelino Ynga, uno de los dirigentes de la comunidad San Juan Bautista, señaló hace unos días que le dijeron al papa que “la organización a la que pertenecía el señor Antonio Eguren nos ha vendido nuestras tierras de la comunidad, tierras que nosotros poseemos”.
NEGOCIOS INMOBILIARIOS
El semanario H13 también revela que frente a Ia Universidad Nacional de Piura en un terreno de 240 hectáreas se construye la urbanización Miraflores Country Club, perteneciente a la Asociación San Juan Bautista. Curiosamente, en los que serían estas redes sodálites, la construcción está a cargo de la Inmobiliaria Miraflores Peru SAC.
A unos kilómetros se encuentra Agrícola Santa Regina SAC que siembra uvas para la exportación sobre un terreno de más de 800 hectáreas.
LAS REDES DE NEGOCIO Y POLÍTICA
La San Juan Bautista también transfirió 36 de sus inmuebles y negocios a un fideicomiso de la empresa Acres Sodedad Tih¡lizadora, fundada en 2020 por el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga.
Con la estrategia del fideicomiso también pasaron a la empresa de López Aliaga, dos oficinas, 23 estacionamientos y más de una veintena de marcas y logos.
Este fideicomiso dificultaría la posibilidad de que los bienes puedan ser embargados por una demanda de privados.
«En los negocios del Sodalicio el personaje central es Jaime Baertl Gómez, él es el jefe holding. Es un sacerdote carismático, que fue amigo de Alan García y varios dueños de canales de televisión.
Jaime Baertl fue mano derecha de Luis Figari y también fue expulsado del Sodalicio por orden del Vaticano.
Según fuentes de Hildebrandt en sus Trece, Baertl ya habría asegurado el patrimonio ante la demora de que sea intervenido o se tome alguna acción desde el Vaticano.